lunes, 1 de abril de 2024

De cómo el rock and roll vive en una banda oleada y sacramentada

 PRIMERA PRIMAVERA POST PANDEMIA…

Guz caminaba por la calle Valparaíso en busca de su último encargo musical, un en vivo de Deep Purple, cuando nota que le tocan la bocina desde una camioneta avanzando lentamente en el taco habitual del centro de Viña del Mar. 

Al volante Andrés, antiguo compañero de banda, de hace dos décadas atrás para ser precisos. 

Tanto tiempo, como va la vida, te ves bien, dame tu número, hablemos, chao, que te vaya bien.

Ya con la nueva joya de la colección en las manos, Guz recibe un mensaje de audio, intuye que es Andrés, ajusta sus fonos y una suerte de racconto musical lo invade: 

No me digas que suena mal!, 

no me digas no me va a gustar! 

Vamos todos a rockandrollear! 

Porque es rock! ROCK! 

Para bailaaaar!”.

Los versos de apertura de una de las canciones de REVOS, la banda en cuestión en la que participaban, interpretados a capella con la misma pasión de antaño por Andrés, le pusieron la piel de gallina y lamento no tener su batería a mano en ese mismísimo instante. Pero más lamento que a pesar de varios intentos dicho repertorio no hubiese terminado en un disco bien hecho.

Hace 20 años atrás la banda no tenía el oficio, ni los instrumentos, ni los recursos para una producción de primer nivel. ¿Pero ahora? Nicolás y Andrés ni siquiera siguieron en la música, pero Marcelo es el bajista de Los Sillas Musicales, publican regularmente, han tocado en el extranjero, los pasan por las radios y tienen sus propios home studio.

Guz no le dio más vuelta, buscó en viejos discos duros los archivos MP3 del repertorio de REVOS, los volvió a ensayar en su flamante nueva batería y cuando se sintió listo contrató el Estudio Clavesol (Viña del Mar) para grabar de forma profesional, multipista, las baterías de todos esos temas. Era la primavera del 2021, se empezaba a acabar la pandemia.

Por su parte, Marcelo (fundador de la banda) tenía en su mente un problema sin solución, en un par de veranos se cumplirían los 20 años del debut de REVOS, y no encontraba forma de conmemorarlo. Sabía que un concierto era imposible, sólo Guz está activo musicalmente y con una agenda poca compatible con la suya. ¿Tal vez un mini documental? Contar la historia de la gira a Argentina?.

Buena Revo Marcelo, tanto tiempo, ¿cómo vas? te tengo un regalo. 

Más imposible que un concierto era un nuevo disco, pero ahí estaba en el mail de Marcelo un enlace para descargar los archivos wav con las baterías grabadas multipista. 

Impresionante Guz, no sé que decir. 

Juegue máster…

El primer convocado fue el productor argentino Mauro Salinas de Dos Motores Estudios y ex guitarrista de la banda trasandina Vieja Cepa con la cual REVOS compartió escenario a ambos lados de la cordillera. Todos los ex REVOS, viejos amigos y nuevas amistades musicales fueron convocados al estudio Rulotronics.

Tras dos años de trabajo, muchos buenos recuerdos, y mucha más cerveza, la formación original de REVOS, Andrés, Guz, Nico y Marcelo junto a una buena tropa de amigas y amigos les invita a conmemorar los 20 años del debut de la banda escuchando el disco UN HERMOSO RUIDO, la versión 2024 de su repertorio.

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